El ciclón Freddy golpea con fuerza Malaui, sobre todo la zona meridional y la ciudad de Blantyre. Inundaciones, desprendimientos y aluviones han sumergido pueblos enteros. Hasta el momento hay más de 200 muertos, cientos de desaparecidos y miles de desplazados.
Las personas de la Comunidad de Sant'Egidio han intervenido inmediatamente para llevar ayuda de emergencia a los que se han quedado de repente con la casa bajo el barro o –como vemos en la fotografía– destruida por la furia del agua. Miles de personas lo han perdido todo: casa, ropa, alimentos, mantas y casi toda la cosecha de la zona se ha perdido.
El centro nutricional de Blantyre ha abierto sus puertas para acoger a los que se han quedado sin casa y no sabían adónde ir, sobre todo niños y ancianos, y para ayudar con las primeras necesidades. En los próximos días se pondrán en marcha otras ayudas para aliviar la dura situación que vive la población.